Hacia "El árbol idóneo en el sitio adecuado"

"El GIS especializado en arbolado, permite sistematizar el análisis de riesgo de arbolado para que forme parte de la gestión diaria de las zonas verdes. Y supone una normalización y control de la información de gran utilidad tanto para la planificación eficiente y minimizar el riego, así como, puede ser una prueba importante ante los tribunales en caso de accidente".

Desde un punto de vista práctico, las actuaciones de mantenimiento que llevemos a cabo en un árbol deben ser las conducentes a dotarle de las condiciones óptimas para su desarrollo: oxígeno, agua y nutrientes en su parte subterránea, y espacio y luz en su parte aérea. En la medida en la que el árbol sea vital, siga su patrón de crecimiento y exprese su forma natural adulta, sin limitaciones de espacio, los problemas que pueda ocasionar serán mínimos.

Sin embargo, una incorrecta planificación de nuestras ciudades junto con la necesidad imperiosa de dotarlas de elementos verdes cuanto antes, han conducido a plantar, de forma generalizada, árboles de rápido crecimiento, cuya contrapartida es que en su edad adulta alcanzan tamaños muy grandes, no aptos para el espacio disponible. Este hecho conlleva una posterior presión de podas para poder “encajarlos” en el espacio disponible. Se ha obviado uno de los principios básicos de la arboricultura: “El árbol idóneo plantado en el sitio apropiado”. Y hemos pasado a “El árbol incorrecto plantado en el sitio inapropiado”.

Para ver la nota completa sigue el link: Hacia "El árbol idóneo en el sitio adecuado"